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domingo, 18 de noviembre de 2007

¿POR QUÉ OCULTAR?:'EL PRESTIGE'

LOS CIENTÍFICOS TRABAJAN

http://www.abc.es/20071118/nacional-politica/xunta-esconde-veta-estudio_200711180253.html

Cuando hace cinco años sucedió aquello, los ansiosos de poder dirigentes de la izquierda volvieron a aprovecharse del desconocimiento de las masas.
Los medios con mayor capacidad de influencia entre quienes se autoalimentan de sus supuestas verdades, -a veces parecen dogmas religiosos, sí de la 'religión' comunista/nacionalsocialista/fascista-, inundaron de hilillos de hidrocarburos las páginas, las hordas se expresaron con la violencia propia de sus características sociológicas y la oposición convirtió el vertido en azote del gobierno y de quienes,-siempre-, pensamos que el análisis es la única solución que se acerca a 'la verdad'.
Ahí queda el 'caso del Exxon Valdez'.
Consecuencias negativas hubo, claro está, pero incluso algun 'pope' de infinito saber, puso contra las cuerdas a científicos que trabajan...fuera de las cámaras.
Ya lo dijo Wilfredo Pareto:Las masas son conjuntos de animales irracionales fácilmente manipulables. Pareto se indigna cuando escucha hablar de la llamada “voluntad popular” y pone de relieve la adulación demagógica del “pueblo”.
Y Ortega y Gasset

viernes, 19 de octubre de 2007

EL HOMBRE-MASA


Agapito Maestre, Libertad Digital

Sí, ZP es el mejor representante del hombre-masa, que describe y descuartiza Ortega, en la tradición de Nietzsche, como principal culpable de una sociedad incivil, sectaria y cruel. El hombre-masa es el que apela al diálogo, al consenso y la bondad de boquilla, porque en la realidad es un extremista radical. El hombre-masa es, sobre todo, un impostor: sustituye el estudio de un libro por la lectura de su solapa; sonríe para matarnos; habla de negociación con los terroristas para ocultar su entrega a los dictados de ETA; y, en fin, se ríe de sí mismo con toda naturalidad, si con ello consigue mantenerse en el poder. El hombre-masa, en verdad, ha conseguido, como dijera Ortega, "la total inversión de los valores: lo superior, precisamente por serlo, padece una capitis diminutio, y en su lugar triunfa lo inferior".