Ignacio me ha removido la conciencia y estas situaciones no las puedo reprimir.
Conste que como principio no estoy a favor del aborto y que por tener un hermano, gran persona, que por haber nacido con un coeficiente intelectual algo menor al 'normal' casi lo echa el insigne doctor López Ibor, no obstante allá en los cincuenta,cuando los 'medios' eran hoscos y escasos, a un centro para personas 'subormales', tampoco estoy a favor de tirar la toalla ante el dolor. En fin, todos podemos poner casos.
Cuando veo a alguien con minusvalía síquica ó física pienso que
esa persona es la fuerte y yo el débil:
Mi admirado y respetado Jorge.
Eres muy valiente al traer a este espacio un tema tan delicado y que tan irresponsablemente se trae y se lleva, a mi juicio; por intereses que no obedecen, al interés humano, ni al cariño que confiesan algunos por sus familiares.
Soy enfermera con una larga trayectoria profesional. En pueblos, hospitales y ambulatorios.
Jamás he escuchado que un moribundo, pida que quiera morir.
He sido testigo de cómo un joven en coma, recobró el sentido. Y muchas cosas inexplicables que ponen de manifiesto que por encima de todo, está Dios. Que no somos nadie
Nadie es el dueño de la vida de nadie, ni de los embriones con fines terapéuticos. Nadie debiera matar a los indefensos, sino defender su dignidad como seres humanos y en ningún caso por la mal llamada “Muerte digna” ¿Que es la dignidad? ¿Si algunos no la conocen?
Es un tema que daría para mucho.
Así que no me gustan las prácticas del Nacional Socialista HITLER.
Estoy en contra del aborto, de la pena de muerte, y de experimentos con embriones, y seres humanos, ni de la selección en el útero del que debe morir. Porque el hombre está capacitado para buscar salidas sin matar a nadie. Nadie puede considerarse por encima del bien y el mal. O vamos al abismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario